Los neumáticos hay que sustituirlos cuando se desgastan, algo que varía mucho en función de diversos factores: tipo de coche, clase de uso, estilo de conducción… Si tienes un Audi A5, tracción delantera y un uso mixto carretera-ciudad a ritmo normal, lo habitual es cambiar los neumáticos delanteros cada 30.000 km y los traseros cada 40.000 km.
Si no haces tantos kilómetros, igualmente un neumático conviene ser reemplazado antes de que cumpla 8 años: su fecha de fabricación está impresa en el mismo grabada en su parte lateral ‘3221’, lo que querría decir que fue fabricado en la semana 32ª del año 2021.
Aunque el estado de los neumáticos sea correcto no se recomienda seguir utilizándolos más allá de los 10 años, pues las gomas aunque exteriormente esten bien, interiormente es otra cosa muy diferente, pues los neumaticos y el caucho de su fabricación, tienen caducidad.
Como muy tarde cuando veas el testigo que llevan todos los neumáticos que queden a ras de la banda de rodadura del mismo,
Una comprobación visual sería aconsejable de vez en cuando, pues puede haber rajas en el neumático por habernos subido a un bordillo, un bache profundo, etc. Abolladuras del mismo, etc… pero si están en mal estado sobre todo lo notarás en la estabilidad del coche y en mojado en la distancia de frenado.
Unos neumáticos en mal estado son motivo de multa -200 e por cada uno-, reducen la estabilidad hasta en un 40% y aumentan la distancia de frenado hasta en un 30%.