9 · SEP · 2019
Desde hace unos meses, el diésel está en el punto de mira por la polémica frase de la ministra para la Transición Ecológica “el diésel tiene los días contados”. El gobierno se ha lanzado y directamente ha fijado una fecha límite para la desaparición de los vehículos de combustión (diésel y gasolina). Concretamente, 2040 para la venta de vehículos y 2050 para su circulación. El problema es que han empezado la casa por el tejado, intentado legislar algo sin tener en cuenta los estudios independientes y datos actualizados.
De momento, la situación no está teniendo el resultado esperado, ya que se pretendía mejorar las emisiones medias de CO2, pero con la caída en las ventas de vehículos nuevos diésel, el resultado ha sido el contrario. Es decir, las emisiones de CO2 han aumentado, según asegura FACONAUTO (patronal que integra asociaciones de concesionarios oficiales de las marcas automovilísticas y de maquinaria agrícola del mercado.)
Está claro que el futuro son las energías limpias y nuestras marcas se están preparando para ello, pero lo que no está tan claro son las fechas límite para este gran cambio, porque el panorama político está en suspense y con ello, el plan “ECO” del gobierno
